Prevención de Plagas en la Industria Alimentaria

Importancia de la prevención de plagas en la industria alimentaria.

9/15/2020

Prevención de Plagas en la Industria Alimentaria

La aparición de plagas y su capacidad para establecerse en un entorno es una amenaza directa para la industria alimentaria, y por ello, las instalaciones deben llevar a cabo una prevención efectiva. Las medidas para evitar plagas, junto con el seguimiento y control de las mismas, son fundamentales para mantener la seguridad de los productos alimentarios.

Para estas industrias, es vital contar con un sistema de Control Integrado de Plagas (CIP), que contemple medidas preventivas, correctivas y de seguimiento. A continuación, se detallan los puntos clave para prevenir plagas en la industria alimentaria:

En el exterior:

  • Puertas: Las puertas que conectan con el exterior deben mantenerse cerradas. En caso de tener que estar abiertas, se recomienda usar mallas o barreras físicas para evitar la entrada de insectos.
  • Gestión de residuos: El área exterior debe mantenerse limpia de escombros y desechos que puedan atraer plagas. Los contenedores de basura deben estar tapados y aislados.
  • Control de drenajes: Es crucial vigilar las salidas de drenaje para prevenir el acceso de plagas a través de estas rutas.

En el interior:

  • Almacenamiento: Los productos deben estar organizados de manera que no entren en contacto directo con paredes o suelos, facilitando la inspección y limpieza.
  • Humedad: La humedad debe controlarse dentro de las instalaciones, ya que su presencia favorece la aparición de insectos y roedores. Se debe mantener un control constante de las áreas húmedas.
  • Limpieza de equipos: Todos los equipos utilizados en la producción deben limpiarse y desinfectarse periódicamente para evitar que sirvan como refugio para plagas.

Medidas adicionales:

El diseño del establecimiento debe evitar rincones o huecos difíciles de limpiar, que puedan convertirse en refugio de plagas. Además, los productos almacenados deben estar correctamente sellados y ser inspeccionados regularmente para evitar cualquier signo de infestación.

Finalmente, el control de plagas debe estar respaldado por un monitoreo constante y un protocolo de acción rápida si se detecta algún indicio de infestación. La formación del personal en buenas prácticas de higiene y manejo adecuado de alimentos es clave para minimizar riesgos y asegurar la protección de los productos alimentarios.